RALLYE DE NUEVA ZELANDA

TRES DÉCIMAS
Para quien suscribe, que ha vivido mucho en el mundo de los rallyes, no le extraño lo sucedido en Nueva Zelanda. Sin mucho esfuerzo recuerdo ‘Montes’ decididos en el último tramo, Darniche-Waldegaard en el 79, Auriol-Delecour en el 93, Portugal luchado hasta el último metro McRae-Sainz lo mismo que algún España-Cataluña. Incluso aquí en España en los campeonatos domésticos se han dado finales apretados.

En una temporada tan igualada faltaba el rallye igualado. Y lo que es mejor, con alternativas. Porque esa ha sido la clave de la emoción y de la incertidumbre.
Con el terreno húmedo Marcus Gronholm tenía cogido el rallye del cuello. Pero en cuanto los tramos aparecían secos, el ‘Canibal’ Loeb no daba opción. Esa fue la clave del rallye.
La noche del jueves llovió y las primeras especiales estaban muy mojadas. Gronholm lo bordó y además se vio favorecido al abrir pista, en vez de perjudicado si hubiera estado seco. Lo aprovechó, ¡y como!. Sólo otro monstruo como Loeb pudo minimizar daños mientras el resto de, llamemoslé rivales, se quedaban sin colores en la cara y sin excusas ante el recital del finlandés y del francés.
Esta etapa vio equilibrada la balanza entre ambos en la segunda pasada por los tramos. Más limpios y secos, en ellos Loeb pudo ir recortando un poco la diferencia. Parecía al finalizar la jornada que nos esperaba un bonito duelo, pero no a lo que íbamos a asistir.
El sábado la mayoría de los tramos estaban secos y Loeb, poco a poco, fue recortando la diferencia con Gronholm. Tanto que acabó líder por un pequeño margen, 1,7 segundos de cara a la última etapa.
Una de las características de Nueva Zelanda son los tramos cortos. Sprints de 6 o 7 kilómetros donde cualquier fallo es irrecuperable.
Última etapa, madrugada en España y la tensión va en aumento. El tiempo está inestable. Hay tramos húmedos, otros secos, algunos presentan ambas condiciones. El cielo amenaza, caen chaparrones dispersos, la elección de gomas es vital.
Primer tramo y Gronholm recupera el liderato por una décima. Siguiente tramo y el francés devuelve el golpe y recupera el liderato con medio segundo.
Tercer tramo del día, seco, y Gronholm reconoce haber cometido algún error. La diferencia crece hasta los 2,9. Nada en otras condiciones pero un mundo en esos momentos.
En los dos siguientes tramos las condiciones son mixtas y Gronholm le saca el máximo partido colocándose a 2 décimas de Loeb. La tensión es increible y se ve ayudada por la frenética sucesión de los tramos sin descanso.
Penúltimo tramo, largo. Comienzo húmedo y Gronholm que lo aprovecha pero no llega a abrir hueco hasta el final. A punto de cruzar la meta el finlandés le ha recuperado 2 segundos a Loeb. Pero comete un pequeño error. Loeb que viene detrás lo pasa mal en el mismo sitio y lo que podía haber sido un desastre para Gronholm se queda en una corta victoria pero muy valiosa. Es líder por siete décimas antes del tramo especial que cierra el rallye.
El tramo, lleno de curvas de 90º obliga a un constante deslizamiento del coche. Loeb lo borda pero Gronholm resiste y sólo pierde cuatro décimas para ganar, un rallye que ya ha pasado a la historia, por tres décimas.
La recompensa por trasnochar fue excepcional y el duelo vivido de época. Ahora sólo hace falta que los rallyes que quedan sean competidos, asumiendo que es muy difícil que se repita la extraordinaria situación.
Tres décimas, visto y no visto.

En los dos vínculos, podeis ver la retransmisión en directo que realizamos en cada prueba del mundial.  http://www.todocoches.com/foro/viewtopic.php?t=15926 y http://www.forocompeticion.com/foro/index.php/topic,1497.msg46829.html#new

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