Bernie Ecclestone le considera junto a Alonso el rejuvenecedor de la F1. La mayoría de los pilotos no ven con buenos ojos su posible llegada. Es uno de los más grandes motociclistas de la historia. Ferrari le quiere en su coche en 2007. Así está el tema Rossi
Tiene veintiséis años y siete títulos de Campeón del Mundo. Sencillamente no tiene rival. Tras arrasar con Honda se fue a la eterna oponente Yamaha. La sacó del ostracismo y le ha dado dos títulos consecutivos. En 2002, Bernie Ecclestone decidió que quería a Rossi en la F1. Su carácter y sus genialidades le marcaron. “Si tuviera un equipo como en los 80 le ficharía sin dudarlo. Necesitamos un Valentino en la F1”
Ferrari quiere al astro italiano desde hace tiempo. Pero no fue hasta el año pasado cuando Rossi se sentó por primera vez en el coche. En ese test, y antes de salir a pista, sorprendió a los mecánicos que hacían apuestas sobre su tiempo final en Fiorano. Se lo dejaron muy claro. Si era capaz de rodar en un minuto significaría que habría ido muy deprisa. Si era más lento no valía para la F1. La mayoría de los mecánicos apostaron contra él. Les dedicó la mejor de sus sonrisas, algo que nunca le abandona, y se lanzó a la pista. La mañana fue terrible para él. “En mi moto me siento libre, me relaciono con ella. En el F1 no te puedes mover, es como una caja. No es natural”. Los mecánicos le enseñaron como lo hacia Schumacher. “Valentino, para entender al coche tienes que ir deprisa. Michael usa el doble de fuerza en su pierna cuando frena. Hazme caso, a más deprisa corras, más estable notarás al coche”.Pero el ánimo de Valentino no mejoraba. “Voy tan lento que al coche le cuesta ir recto. No consigo que las ruedas cojan la temperatura adecuada” Comiendo en el box vio en todos los telediarios que era la portada de todos ellos. Su test con Ferrari era un asunto de interés nacional. Los aficionados se agolpaban alrededor de la valla del circuito. Una simple prueba se había transformado en un compromiso para Rossi. “Noblesse obligue”. Llega Schumacher, se hacen unas fotos, pero no hablan del coche. Oscurece cuando Rossi vuelve a subir al coche. Con las últimas luces del día empieza a rodar cada vez más y más rápido. En su última vuelta marca un 59,1s. Muchos mecánicos pierden su dinero pero todos le reciben con una ovación prolongada.”Cuando no corro siempre busco el sol y mucha luz. Pero en la pista soy oscuro y agresivo. Según caía la tarde me compenetré con el coche”
SEGUNDO TEST
El segundo test se produce dos meses después. El tiempo no deja lugar a dudas, 57,5 s. Rossi hace cambios en el coche y habla con los ingenieros. El propio Ross Brawn no oculta su sorpresa. “Fue rápido, lo que no me sorprendió, pero lo que me maravilló fue su entendimiento del coche.” Incluso el propio Brawn dejó caer que Rossi podría haber firmado un acuerdo para realizar un test al mes la próxima temporada. Algo que el italiano negó pero dejando la puerta abierta. “Ferrari es el desafío definitivo. ¿Pero como pueden saber ellos que voy a hacer el próximo año cuando no se que haré la semana que viene?” Los últimos rumores señalan la firma de un contrato por tres temporadas, a partir de 2007, con unas cifras mareantes y con McDonalds detrás. Lo que queda claro es que Rossi necesita cosas nuevas. Ha hecho y sigue haciendo “locuras”. Su paso de Honda a Yamaha le puso a los pies de los caballos. Davide Brivio, Director del equipo italiano de Yamaha, consiguió convencerle porque sabía que Rossi estaba tan loco como para irse a la rival japonesa. Nadie en la marca del diapasón, ni siquiera los principales responsables en Japón, pensaron que funcionaría. De hecho, en una reunión secreta previa a la firma, uno de ellos se durmió en plenas negociaciones.
MOTIVACIÓN
Su paso a Yamaha le abrió nuevos horizontes pero, después de los éxitos, Rossi necesita más. “He ganado con Honda y Yamaha y puede ser interesante ganar con un tercer equipo, por ejemplo Ducati que son italianos. Y está la F1 y los rallyes que me gustan muchísimo.” La locura en Italia a su alrededor es increíble. Se le considera el único capaz de repetir el título de Campeón del Mundo con Ferrari como hiciera Alberto Ascari. Fútbol, Ferrari y Rossi, así vive Italia hoy en día. El anuncio de su test en Valencia rodeado de más pilotos a pesar de ser esperado siguió sorprendiendo. El circuito de Cheste estaba abarrotado de periodistas. Un día gris y lluvioso anticipaba una jornada delicada par todos. Ciento treinta y cinco periodistas estaban acreditados para cubrir las tres jornadas. Al final del primer día Rossi hizo acto de aparición en la pista. No llegó a la curva diez. Un trompo le hizo completar la vuelta en turismo. “Si necesita mi consejo sobre como rodar con un F1 sin hacer un trompo que me lo pida”, voceaba un pletórico Biaggi. Con más expectación si cabe, en la segunda jornada Rossi completó 51 vueltas y acabó en novena posición. Hubo pasadas de frenadas, dos trompos en el mismo sitio del día anterior. Pero dejó una sensación de estar intentándolo todo el día, de buscar el límite continuamente. La tercera jornada le enseñó los problemas de estos monoplazas cuando se rueda muy cerca. Siguiendo a Montoya antes de la curva 4 su Ferrari acabó en la arena. Dio 54 vueltas y mejoró sus tiempos del día anterior. “No he venido a demostrar nada a nadie. Sólo quería profundizar en mi conocimiento del coche y agradezco a Ferrari esta oportunidad.” Los pilotos de F1 le han recibido bien aunque con disparidad de opiniones. Webber le calificó como “muy valiente venir aquí y compartir el circuito con nosotros”, Michael Schumacher calificó como “muy positivo su trabajo con el equipo” y Alonso cree que “no podrá ganar en la F1.” Valentino no quiere entrar demasiado a comentar la necesidad que tiene la F1 de él. Pero sí le parece que le falta algo. Sobre los pilotos habla de Raikkonen pero inmediatamente reconoce a Schumacher como el gran talento. Del finlandés reconoce que habla aburridamente. “Suena monótono pero cuando supe de sus juergas creo que debe ser el más interesante de todos los pilotos de la parrilla.” Rossi tiene claro lo que necesita. “Si tengo un año para probar el coche puedo ser competitivo.” Es un ganador nato y haga lo que haga lo demostrará. Y ser competitivo está muy claro lo que significa para Valentino. “Significa ganar. Corro para ganar. Sea en coche o en sea en moto.”