INALCANZABLE
Esa es la sensación que da Sebastian Vettel un GP tras otro. De ser inalcanzable, de tener siempre algo guardado, de no dar la más mínima opción a los rivales.
De nuevo lo tres mejores pilotos de la F1 coparon el podio. De muy distinta manera. Vettel no tuvo la más mínima oposición. De haberle llegado, en la salida, probablemente no habría tenido mucho problema en quitársela de encima. Pero gracias al duro trabajo, una vez más de Webber, se quedo en solitario en cabeza. Abrió hueco y poco a poco fue aumentando pero sin exagerar. Un dominio insultante que no lo parece pero que le hace inalcanzable. El Grand-Chelem conseguido hoy, pole, victoria vuelta rápida y liderar todas las vueltas de la carrera, es la materialización de ese control de una F1 que le pertenece, domina y que ha dominado casi sin despeinarse.
Detrás Button ha vuelto a dejar claro que este McLaren es suyo. Lo domina, maneja y exprime a la perfección. Sin malos gestos, con finura, controlando, sacándole el jugo cuando debe. Así parece poner en aprietos a Vettel aunque parezca un espejismo. Pero Jenson sigue haciendo una enorme temporada salvando el honor de Mclaren.
Si Button puede manejar un poco los tiempos, todo lo contrario le ocurre a Fernando Alonso. El español sólo puede tirar y tirar y tirar desde el primer metro de la carrera. Apretar los dientes, clavar el mentón en el pecho y sacar en cada vuelta todo lo que tiene su monoplaza. Esa es la única manera de conseguir entrar en el podio, 11 ya, y de mantener viva la llama del ¿consuelo? del subcampeonato.
PAREJA DE MODA
Dónde Vettel arrancó sin problemas, Alonso se encontró con Webber. Ese ‘estorbo’ permitió a Button pasar a la segunda plaza. La carrera entonces se centro en el duelo entre el australiano y el asturiano.
Por detrás, como polos opuestos, Hamilton y Massa se volvían a encontrar. Pero antes asistíamos a una carrera muy gris de Hamilton. Sin nada que ofrecer, como ausente, el británico pareció muy afectado por la sanción de tres plazas, más que justa, que le cayó junto a Pérez por ignorar doble bandera amarilla agitada.
Su incidente con Massa se produce por dos razones, Una porque Hamilton, en su línea de la carrera, no frena o no hace la maniobra como en él es habitual. Dos, porque Massa le mete un cerrojazo infame. Por mucho que esté por delante, cuando se tocan es rueda delantera con trasera, Massa sabía que Hamilton estaba ahí. Sin olvidar que el brasileño le abre la puerta de una manera escandalosa y que con eso le da pie al británico a colarse. Massa no puede hacer la maniobra como si no hubiera nadie, y el toque ha sido inevitable. Ha habido debate sobre la sanción. Es la sexta vez que se ven envueltos en un incidente en esta temporada. Si desde el principio hubieran caído las penalizaciones, posiblemente otro gallo habría cantado. Claro que es incomprensible por qué no se sancionó a uno de los HRT tras el toque a Trulli en la segunda curva. Misterios insondables de los comisarios.
EL RESTO
Destacar a Schumacher que batió de nuevo a Rosberg y sobre todo a Toro Rosso y el modo avión, casi como sus hermanos mayores, que ha adquirido en esa parte media de la parrilla. Alguersuari ha vuelto a hacer buen uso, y disfrute, de un gran coche para subir hasta la octava plaza.
EL CIRCUITO
Me ha encantado el nuevo trazado queha llegado al Mundial. Si el GP se asienta y se puede limpiar un poco la pista estamos ante una carrera que puede ser un clásico. Rectas largas con freandas curiosas. Zonas muy técnicas. Creo que es un disfrute tanto para el piloto como para el espectador. Por cierto. Alrededor de 90.000 personas en el circuito. Ahí lo dejo.
Y así vamos quemando GP hacia el final de la temporada. Quién más quien menos, con mayor o menor publicidad, con mucho o poco secretismo va probando cosas para 2012. De momento la necesidad es alcanzar a Red Bull y Vettel. Inalcanzables hoy por hoy.
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[...] vez Vettel no se conformó con la victoria en el nuevo Gran Premio, sino que decidió demostrar a todos que hace lo que le da [...]