LA MIRADA DEL LINCE
Javier Castillejo va a volver a luchar por un título mundial. Anoche derrotó al argentino Carrera. Es una gran noticia que casi pasa desapercibida. En este pais del buen rollito, las alianzas de no se que leches y demás paridas que no van a ningún sitio, el boxeo no tiene sitio. Todavía nos quedan los toros, pero ya veremos cuanto.
Cierto es que el boxeo no genera héroes como otros deportes que puedan ser explotados. Si no más bien pobres diablos mal asesorados que dilapidan lo ganado en vicios.
Pero siempre hay excepciones y Javier es una de ellas. Buscando fortuna en el pais que le acogió en su infancia cuando sus padres emigraron, Alemania le da las oportunidades que no hay en España.
La historia de este combate se remonta a Diciembre cuando el argentino Mariano Carrera le derrotó puesto hasta las cejas de clembuterol. Un anabolizante que se le daba a los terneros, no sé si a los cerdos, para engordar. A pesar del gran combate de Javier, el argentino aguantó lo indecible y terminó venciendo por KO técnico.
Además sólo le cayeron cuatro meses de sanción en una arbitraria decisión de la Asociación Mundial de Boxeo.
El caso es que ayer Javier se comportó como lo que es, un Campeón. Salió a por el argentino y con un boxeo de altura y jugándosela, le derrotó por KO en el sexto asalto.
La Mirada del Lince fue más salvaje que nunca. Ahora espera Felix Sturm. Javier luchará por el título con 40 años. Se ha cuidado toda la vida y lo va a seguir haciendo. Y seguirá luchando por los títulos en casa. La casa que le acogió de pequeño, no la que le sigue ignorando en el ecuador de su vida y en el cada vez más cercano final de su brillante carrera.
