Qué pena que en la mierda de televisión que tenemos en general, dos de los mejores programas coincidan en el tiempo.
Si no fuera suficiente con la bazofia tomatera, con la humillación a la persona en concursos cortados por el mismo patrón sólo pensados para exprimir el producto hasta la extenuación. Con informativos en muchas cadenas en lo que lo único que existe en el mundo son catástrofes, que también, violencia, que por supuesto, y casquería, que por supuesto. Pero se olvidan noticias científicas, de humanidades, solidarias.
Pues si no fuera suficiente con eso, como decíamos, nos coinciden los buenos.
Voy a empezar por el que veo en directo. El Hormiguero en Cuatro. Me gusta Pablo Motos. Desde sus monólogos en Onda Cero, puede que haga de eso casi 10 años, cuando nadie los hacía. Luego vino la fiebre del monólogo y su prostitución salvaje. Después su programa en M80 donde tenía la tarea de hacer olvidar a Gomaespuma, ni más ni menos.
Y ahora en la tele donde ha conseguido trasladar el formato de la radio. Dinamismo y frescura. Con unos colaboradores de lujo y un diseño pensando en pasarlo bien y hacer disfrutar.
Si no fuera suficiente con la bazofia tomatera, con la humillación a la persona en concursos cortados por el mismo patrón sólo pensados para exprimir el producto hasta la extenuación. Con informativos en muchas cadenas en lo que lo único que existe en el mundo son catástrofes, que también, violencia, que por supuesto, y casquería, que por supuesto. Pero se olvidan noticias científicas, de humanidades, solidarias.
Pues si no fuera suficiente con eso, como decíamos, nos coinciden los buenos.
Voy a empezar por el que veo en directo. El Hormiguero en Cuatro. Me gusta Pablo Motos. Desde sus monólogos en Onda Cero, puede que haga de eso casi 10 años, cuando nadie los hacía. Luego vino la fiebre del monólogo y su prostitución salvaje. Después su programa en M80 donde tenía la tarea de hacer olvidar a Gomaespuma, ni más ni menos.
Y ahora en la tele donde ha conseguido trasladar el formato de la radio. Dinamismo y frescura. Con unos colaboradores de lujo y un diseño pensando en pasarlo bien y hacer disfrutar.
El otro es el gran Wyoming y su Intermedio en La Sexta. Wyoming ya es perro viejo y tiene un don especial para el show. Todo lo que hace es igual pero a la vez distinto. Es un tipo que cuando le han dejado hacer lo que él quería ha demostrado que triunfa. Y con el Intermedio lo está haciendo.
Pues estos dos programas coinciden en la parrilla. Son diarios y a la misma hora. Además viendo parte de la competencia, por ejemplo escenas de matrimonio, un bodrio lleno de tópicos infumable, no hay mucho más donde elegir.
Una pena. Pero que trabaje el DVD y grabe el otro programa. En cuanto acaba uno a ver el otro. Salgo del hormiguero y hago un Intermedio.
Una pena. Pero que trabaje el DVD y grabe el otro programa. En cuanto acaba uno a ver el otro. Salgo del hormiguero y hago un Intermedio.
