Mis Pasiones

Ver la portada del AS de hoy es para vomitar hasta dejarse el estómago como una patena. No por la portada en sí, no. Si no por la foto en la que tres irresponsables, descerebrados y a lo mejor poco serenos individuos aparecen manchando y mancillando nuestra blanca camiseta. El cuarto es uno de los organizadores del evento. Que dado el caso, ni pincha ni corta. Aunque si es el autor de la idea mejor se podía haber estado en casa cenando con los suyos.

 

Vomitivo a más no poder.

En dicha foto que tenéis con la portada se ven a dos de los mayores problemas que tiene el ‘Madrí’ y a uno de los mayores problemas que tiene el ‘Aleti’.
Empezando por los respetables vecinos, lo último que soy es ‘anti’ nada, me dan pena. Pena que se dejaran llevar por un corrupto, quasi mafioso, al que regalaron el club si darse cuenta de que lo perdían para siempre. Ahí está la gestión. Que se dedique al cine y a chupar del frasco de las subvenciones para perpetrar supuesto cine español. Con dos cojones.
En el extremo derecho, en Villar eso es indiferente porque no sabe ni donde está (sólo donde haya pasta y corrupción), con la camiseta blanca puesta.
Que este señor no sepa lo que es el decoro, la decencia y el saber estar, es algo claro y diáfano. Su actitud sería para que dimitiera hoy mismo y no volviera a vérsele el pelo. Ya hay que ser sinvergüenza y caradura para ponerse una camiseta que ha odiado toda su vida. 
Todo eso sería lamentable y vergonzoso si el que se coloca entre ambos impresentables no fuera Ramón Calderón. El afamado ‘Boquiqui I’. A la sazón ¿presidente? del ‘madrí’. El más impresentable, sí mas que Lorenzo Sanz, presidente (nótese que no lo pongo en mayúsculas porque no me da la gana) que hemos tenido en la entidad blanca.
Ese individuo debería haber velado por la pureza de la zamarra blanca. No prostituyéndola en una reunión de amigos permitiendo que vaya a parar a manos del responsable del equipo rival, que te odia y es un ‘anti, y mucho menos al presidente de la Federación de Fútbol. Aquel que se tiró a los brazos de Laporta, el que traicionó al fútbol español y votó a favor del dormilón de Villar a cambio de los favores que todos conocemos. Aquellos favores que partían del bien llamado en la prensa, El Eje Villar-Laporta. Pero claro, ‘Boquiqui I’ tiene una enfermiza obsesión por estar y salir en los papeles y en las ondas. El caso es hablar hasta en radio Taxi o salir manchando la camiseta de todos sus socios y simpatizantes. Con tal de salir y que se le vea y se le oiga, todo vale. Pues no. No vale.
Pues ahí está la foto en la portada. Si estos tres individuos no dimiten hoy, sólo puede ser porque son unos desahogados. Y no vale que estuvieran borrachos, si es que lo estaban. Eso sería un agravante.