24 de septiembre de 2005
En McLaren se quejaron amargamente de lo rápido que dio Fisichella la vuelta en Spa. El italiano se quiso curar en salud no fuera que el cielo abriera antes de tiempo. Cada uno hace la vuelta de aceleración y deceleración como le viene en gana o le manda el equipo.
McLaren está muy seguro de su superioridad sobre Renault. Pero el tiempo de Alonso y el de Fisichella, saliendo el primero, les ha llenado de dudas.
Curiosamente, Raikkonen apretó mucho en su vuelta de entrenamientos tras Alonso. En este caso no nos llegaran lamentos desde el equipo de Woking y su piloto. La jugada psicológica que intentó el equipo británico, es normal. La idea era obligar a Fernando a hacer su vuelta de regreso a boxes más rápido de lo normal. Para ello el finlandés apretó y mucho. Con lo que no contaba Raikkonen era con el vueltón del español. Esto y la ansiedad por presionar a Fernando le saltó la válvula del vapor y se desinfló en la frenada de fin de de recta. Corre corre que te pillo pensaba Kimi. Lo que no sabía es que cuando él iba, Fernando ya volvía y le cogió por sorpresa. La batalla psicológica la ganaba Alonso.