Publicado en el número 76 de Grand Prix.
Esta carrera ha llevado a McLaren al peor de los escenarios. Aparte de escenificar un nuevo dominio insultante de Ferrari, el equipo anglo-alemán ha certificado que el piloto que puede hacer frente a Ferrari no es Hamilton, sino Fernando Alonso.
En cuanto le han dejado hacer lo que él ha considerado oportuno con la estrategia, decisiones sobre la marcha incluidas, ha demostrado que es capaz de dar la batalla a Ferrari de cabo a rabo. Hamilton dejó claro en Francia que no quería luchar y no apretó a los Ferrari. Sin embargo, Fernando ha arriesgado con un segundo relevo corto que casi le ha funcionado. Sólo un Ferrari fantástico en manos del enrachado Kimi le ha privado de la gloria del triunfo.
Hamilton ha demostrado que su objetivo era batir a Fernando pero, mientras, poco a poco, los Ferrari acechan como lobos. Alonso sin embargo ha centrado su lucha con los Ferrari y, de paso, ha batido a Hamilton. El inglés ha minimizado daños en una batalla que se le había puesto muy fea.
Ahora McLaren debe tomar decisiones inequívocas. Hamilton está verde para poner el coche a punto. Lo ha demostrado en Silverstone. No tiene la experiencia necesaría para una lucha de este nivel y ha estado gris en las dos últimas carreras, con la falta de ambición de Francia.
Fernando no se ha rendido en ningún momento. Estuvo a punto de hacer la pole con un coche más cargado que sus rivales. Su estrategia ha sido de maestro y tiene la experiencia de la lucha contra Ferrari. La decisión está clara y no creo que hagan falta más pruebas. Hamilton puede seguir haciendo podios y llevarse el campeonato, pero los huevos de McLaren deberían ir a la cesta de Alonso. Es la más sólida y la más llevadera.
