Una de las cosas que había caracterizado a BMW en su andadura en la F1 era la coherencia. El equipo bávaro tenía un programa que desembocaba en 2009 con la lucha por el título mundial después de ir dando los pasos adecuados.
Se pasaron unos duros inicios, como cualquier hijo de vecino excepto si eres ‘El Mentiroso’, y el año pasado, un año antes del ‘año bávaro’ que provocaría la peregrinación de sus fieles a la sede del equipo en Munich, se encontraron en una situación privilegiada. Practicamente a mitad de campeonato estaban liderando el mismo. La previsión y la maquinaria alemana es de la más eficaces del mundo. Pero la cintura para manejar los imprevistos no tanto. O al menos en esa zona del país. En vez de echar el resto y poner a Kubica en órbita añadiendo un elemento nuevo en la lucha, decidieron plegar velas y dedicarse al coche de 2009. Aun así el piloto polaco y el equipo vieron como mantenían opciones de título gracias sobre todo a los errores de los grandes para mayor desesperación de Robert.
PASO CAMBIADO
Probablemente los cambios de reglamentación cogieron al equipo con el paso algo cambiado pero se centraron en el coche pronto. En el coche y en el KERS. En Munich pensaron que tenían oro con su KERS. Tanto que al detectar problemas entre los demás equipos con su implantación e incluso, con la certeza de que varios no iban a usarlo, se negaron a prohibir su uso como se planteó en una reunión de la FOTA a finales de la pretemporada.
Pero el comienzo de temporada les ha arrojado a una durísima realidad. Su piloto principal, el llamado a ser Campeón con ellos, sufre mil y un problemas exacerbados con su falta de cálculo en Australia que le lleva contra el muro. No es verter las culpas sobre Kubica evidéntemente, pero le faltó algo de experiencia, como a Vettel en Bahrein, necesaria para manejar las situaciones cuando se quiere ser Campeón.
Lo de Australia fue un espejismo. El resto del comienzo de la temporada ha sido un calvario enorme que ha desembocado en una decisión absolutamente paradójica. El equipo correrá en Barcelona sin KERS. El mayor defensor, el equipo que se opuso ante el resto de la parrilla para defender el dispositivo, ahora lo ha sacado del coche. Sólo Ferrari y McLaren lo llevarán en Barcelona, como bien dice Zapico en su blog el KERS es como Calimero, creo que más como un compromiso con la vanguardia de la tecnología que otra cosa.
Las señales de BMW son de clara desesperación. Sin duda que el tema de los difusores les ha hecho mucho daño. Han tenido que ponerse a trabajar en áreas en las que no tenían pensado hacerlo y eso les limita mucho su radio de acción. ¿Qué estará pensando Kubica? ¿En un cambio de aires?
P.D. Los cambios de aires quedan para otro post porque la silly-season puede estar muy movida. De hecho creo que ya lo está.