En la FIA está pasando algo muy muy raro. Tras ‘cantar la gallina’ con el tema del cambio de puntuación, legalmente lo tenían perdido, se suma hoy la reducción en el precio de las super licencias de los pilotos a partir de 2010.
La causa esgrimida es que debido a la reducción de costes que entrará en vigor a partir de 2010, las cuotas que deben pagar los pilotos verán reflejada esa reducción.
De nuevo parece una razón de peso pero no cuadra. Aquí parece que hay gato encerrado. No es normal que la FIA claudique tanto y tan seguido. ¿Qué hay detrás de todo esto?
Apartar la atención de algo sobre lo que habrá que entrar en profundidad lo antes posible y que está pasando de puntillas tras el terremoto del tema de la puntuación. La limitación del presupuesto de los equipos a 30 millones de libras anuales.
Así que igual que en los deportes americanos existe ese límite salarial, a partir de 2010 habrá que llamar a la F1, la NF1A.
Con la que cae y Max no se inmuta. Raro, raro, raro.
