El “tonto” del pueblo es una figura en muchos casos entrañable. Son personas que han sido apartadas de la sociedad normalmente por ser distintos, por tener problemas no diagnosticados. La gente solía ser muy cruel con ellos y se veían obligados a vivir apartados del mundanal ruido.
Afortunadamente, la precoz diagnosis de enfermedades casi ha acabado con esta figura tan desdeñada.
En la F1 hay uno. Ralf Schumacher. Es algo increíble la capacidad que tiene éste individuo para provocar problemas una y otra vez. Como no es cuestión de enumerar sus múltiples incidentes, Yuji Ide a su lado sería Fittipaldi, no les querría aburrir. Sólo me queda verificar la sospecha que tengo sobre él. A éste, cuando vieron como era de pequeño, en vez de darle una tiza o un pito le dieron un kart. Así le luce el pelo a sus compañeros de profesión que le temen más que a un nublado.