Entre tantos cambios con los que nos trufa la FIA la F1, no es raro que alguno sea provechoso. En cualquier caso no ha sido de las inertes y depravadas mentes de sus indeseables y desgraciados miembros de donde ha salido la idea que nos ocupa. Si no de la propia FOTA que, demostrando que sabe lo que quiere y el camino a seguir para innovar, hizo una propuesta para prohibir los repostajes en los GP.
CONSUMO
De ésta manera cada constructor de motores tendrá que trabajar al máximo para maximizar el consumo. A menor consumo, menos peso a llevar en el coche con lo que se obtienen mejores prestaciones. Y de paso es una tecnología que se puede trasladar a los vehículos de calle. Otra razón a favor de la FOTA y de su posible capacidad para regular ese deseado campeonato paralelo dándole una patada en el culo a la FIA, a la FOM y a otros aprovechados del montón.
VALOR
Lo mejor de la medida de la prohibición del repostaje es que elimina de facto la calificación falseada de la que nos han hecho ‘disfrutar’ los últimos años. Ahora volveremos a ver a los pilotos luchando por la ‘pole’ cara a cara. Como ha sido siempre y debió ser hasta que la panda de iluminados se cargaron la memoria, entre otros, de Senna, quince años ya, y le quitaron el valor a las poles.
Poles que ahora volverán a contar de verdad. Es la mejor noticia de los últimos días.
Senna marcando su famosa pole en Mónaco 1985