PARAR EL MUNDO
El mundo de la F1 se paró en Suzuka. Y no porque Hamilton batiera igualara el record de Ayrton Senna, en cuanto a número de victorias se refiere. Si no porque Fernando Alonso estalló a través de la radio de su McLaren Honda.
PARAR EL MUNDO
El mundo de la F1 se paró en Suzuka. Y no porque Hamilton batiera igualara el record de Ayrton Senna, en cuanto a número de victorias se refiere. Si no porque Fernando Alonso estalló a través de la radio de su McLaren Honda.
Presentaciones, test de pretemporada. La F1 está en marcha pero podría estar en órbita y no es así.
El mundo está cambiando. Obligado o no por el liberalismo de los desalmados, ávaros y demás especies a colgar del palo mayor, cambia.
La idea de Ecclestone, que permitió a la gran mayoría de los que están en la F1 vivir un periodo de vacas gordas sin parangón, no confundir con la isla pirata de Paragon aunque en parte es una consecuencia, está caduca. No es posible con la situación actual mantener ciertas exigencias o para mantenerlas dar la espalda al útero materno de la F1.
Mientras la FIA con su habitual torpeza intenta que se reduzcan los costes de manera muy ’sui generis’, de hecho los han disparado, y saca de quicio a todo bicho viviente. Obviando claro está ciertas actitudes que podrían ir al Juzgado de Guardia como prevaricación y cohecho, algo que en la asquerosa fauna española de corruptos hideputas es el pan nuestro de cada día, sin ir más lejos con el tema de los difusores. Favorecido por el hecho de tener unos reglamentos de carreras de pueblo en los que casi todo vale y si no, ya veremos.
Ecclestone quiere mantener su imperio como sea y seguir cobrando la intemerata con la connivencia de la FIA. Horarios de locos que provocan problemas de visión en Australia y la suspensión del GP malayo. Paulatino abandono de los circuitos míticos europeos en aras de lugares sin tradición y que presentan un aspecto en las gradas más que paupérrimo. Abandono de norteamérica que no deja de ser un mercado vital para la mayoría de los constructores. Un despropósito.
La FIA accede a ir de palmero y se saca de la manga una regla con los neumáticos que es peligrosa. Porque un vehículo, como bien ha dicho Alonso, circulando seís segundos más lentos en un circuito es un peligro para los demás.
Total que los equipos soliviantados. Los pilotos dejando claro cada vez más que no van a tragar con cualquier cosa y amenazando veládamente con tomar medias. Recordemos que sólo Raikkonen no está en la Asociación de Pilotos.
Sólo hay un nubarrón en el horizonte que se torna muy amenazador viendo la torpeza de varios dirigentes de equipos. Y no es otro que la FIA está consiguiendo que haya refriegas entre los equipos poniendo en peligro al ‘Octubre Rojo’, la FOTA.
Así que visto lo visto ya va siendo hora de dar un puñetazo en la mesa y otro a Ecclestone y Mosley y desligarse absolutamente de la FOM y la FIA y crear un campeonato como debe ser, donde todos, circuitos, equipos, pilotos, aficionados (aayyy los aficionados) salgan favorecidos. No es tan difícil, simplemente hay que tener los cojones para dar el paso. Más allá de contratos con Ecclestone, la FIA o el fio. Si hay que abandonar la F1 y correr con otro nombre, hecho. Ya se sabe que hecha la ley, hecha la trampa. Y aquí, de eso, todos saben mucho.
¿Llegará Valencia a organizar tres GP?
Hay rumores muy fuertes en Portugal sobre los promotores del nuevo trazado de Portimao, Circuito Internacional del Algarve. Éstos están intentando hacerse con los derechos de organización del GP de F1 que tiene ahora Valencia. Para ello están en negociaciones tanto con Ecclestone como con la Comunidad Valenciana.
CRISIS
Aunque la crisis ha golpeado fuertemente también a Portugal, el hecho de que el circuito luso sea permanente simplifica mucho las cosas. Para Valencia el gasto del montaje y desmontaje anual es muy grande y sería algo que se ahorrarían, más los más de 20 millones de euros a pagar anualmente a la FOM por la celebración del GP .
Dada la brusquedad con la que llegó la crisis y siendo la Comunidad Valenciana una de las más castigadas por la misma, con el paro imparable y con los ingresos del ladrillo más secos que el palo de un cohete, no es de extrañar una cesión de los derechos a los promotores portugueses.
El responsable de la Comunidad, Camps, y la Alcaldesa de Valencia, Barberá, habrían recibido el beneplácito de Bernie Ecclestone. Al máximo mandatario con tal de cobrar le da igual todo.
Así que quien quiera ver la F1 en Valencia que se de prisa. En 2009 sí que se organizará el GP en Valencia, para 2010 estará en el aire y en 2011 como muy tarde Portimao recogerá el testigo. O al menos eso es lo que están intentando en el país vecino. Y ya se sabe que cuando el río suena…
Los promotores del Circuito Internacional del Algarve están apostando fuerte.
Luca Montezemolo está a gusto con su puesto al frente de la FOTA y está apretando las clavijas sin pestañear a los dos estamentos que maldirigen la F1. La FIA y la FOM.
La batalla con la FIA la va ganando. Dejando claro a Max Mosley que ciertas cosas no se pueden cambiar en la F1. Porque sencillamente dejaría de ser F1.
La otra batalla que ha comenzado es contra la FOM lo que es lo mismo, contra Bernie Ecclestone.
Las peticiones que hizo de recibir más dinero son lógicas. Ahora, su demanda para conocer los beneficios y poder rebajar el precio de las entradas a los GP es un torpedo a la línea de flotación de la FOM. El segundo torpedo, que ya dejó apuntado tras las carrera de Singapur, es sobre la manera de promocionar la F1. Discutir si es bueno tener tantos circuitos exóticos y prescindir de verdaderos monumentos clásicos.
Montezemolo ya mandaba en 1975
Montezemolo no ha tenido que hacer una votación entre los aficionados ni hacer una campaña patética como la de Ecclestone y sus medallas. Y no lo necesita porque es un aficionado más. Que desde 1973 está al mando de una manera o de otra en Ferrari. Y que como aficionado conoce, sabe, padece y disfruta la F1. Que sabe que la F1 no puede pasar sin Ímola, Silverstone, Spa, Zandvoort o Suzuka. Que por motivos comerciales debe estar en norteamérica. Y que por propia filosofía no puede aceptar las imposiciones estandarizadoras de la FIA.
Me quedo con un frase. “No estoy dispuesto más a que me dicten ciertas cosas sin nuestro control”. Refieriéndose al tema de los beneficios y los nuevos circuitos.
El furibundo ataque que ha soltado Ecclestone contra Ferrari y Montezemolo no es más que una maniobra para intentar romper la FOM. Algo que en tiempos de Jean Todt era muy fácil. El ‘pequeño Napoleón’ estaba en una eterna actitud de conmigo o contra mi que se traducía en la falta de acuerdos entre los equipos. Esa actitud fue clave para firmar aquel acuerdo en 2003, tan beneficioso para Ferrari, que cortó de raíz cualquier intento de escisión.
Pero ahora los equipos confían en Montezemolo y, en el caso de que algún ignorante no supiera que Ferrari cobra más, no van a caer en el anzuelo de Ecclestone. Porque, queramos o no, la F1 sin Ferrari no sería F1.
La amenaza de Montezemolo es alta y clara. O llegamos a un acuerdo o nos vamos y montamos nuestra competición por nuestra cuenta.
La paz entre los máximos organismos se ha acabado. La debilidad de la FIA, por culpa de un Presidente inaceptado por todos, y de la FOM, con un Ecclestone que les hizo rico pero que empieza a dar muestras de senilidad, ha cambiado el balance de poder. O ambos organismos reaccionan o pueden perder a la gallina de los huevos de oro.
Montezemolo ha abierto una guerra con dos frentes pero ha esperado a tener uno estabilizado, FIA, para abrir el segundo, y parece que más importante, con la FOM. La estrategia es clara y está actuando tácticamente con brillantez.
Mosley y Ecclestone tienen un grave problema entre manos, sobre todo el segundo