
Que un error en la salida sea la piedra sobre la que construir una victoria memorable, hizo del GP austriaco un clásico a recordar.
UNO DE LOS GRANDES
Poco más importaba del GP de Abu Dhabi, con todo decidido, que el adiós – o hasta luego - de Alonso de la F1. Más allá de números deja la categoría uno de los más grandes de siempre. Su figura, como la de los que se fueron antes que él, irá creciendo con el tiempo.
LA FORTUNA HAY QUE BUSCARLA
Max Verstappen iba camino de su segunda victoria consecutiva. Esteban Ocon se le cruzó en el camino. Lewis Hamilton, recién coronado campeón en México, tuvo que rezar todo lo que supo para que su motor no terminara hecho pedazos por un problema en los escapes. Fue una victoria afortunada para el británico, pero tanto él como Mercedes buscaron esa fortuna con ahínco.
SALIERON A REPARTIR
Tres GP más de una reñida temporada en las que las victorias se repartieron entre los tres constructores de la nobleza de la F1. Mercedes, Red Bull y Ferrari sumaron una victoria cada uno. Con Mercedes y Ferrari dominado en España y Canadá y con Red Bull y Ricciardo logrando una gran victoria en Mónaco, dónde sus rivales prefirieron guardar que arriesgar.
OCASIONES PERDIDAS
Tras Australia, dos pilotos y un equipo se dejaron muchos puntos y opciones en los tres siguientes GP. Bottas, Vettel y Red Bull, por diferentes motivos, empezaron a llenar la mochila de las ocasiones perdidas demasiado pronto.
Empezamos así a ponernos al día con la temporada.