Archive for the ‘Circuitos’ Category

APUNTES DE MALASIA 2016

Martes, Octubre 4th, 2016

SOÑAR
Daniel Ricciardo logró en Sepang una victoria soñada. Lo hizo con una carrera perfecta, manteniendo la presión sobre Hamilton, y aguantando un formidable ataque de su compañero Verstappen.
(más…)

APUNTES DE BÉLGICA 2016

Lunes, Agosto 29th, 2016

MONSTRUO

Max Verstappen, como dice la acepción 1 de la palabra monstruo en el diccionario de la RAE, presenta anomalías o desviaciones notables respecto a su especie.

(más…)

ROBERTO GUERRERO

Martes, Agosto 9th, 2016
Antes de Juan Pablo Montoya, hubo un piloto colombiano que estaba en otra liga. Su falta de carácter y una pizca de suerte le impidieron hacer cosas grandes en la F1 pero, sobre todo, en la Indycar.
Indy 500, año 1987. Un Lola y un March se están jugando la carrera más grande de monoplazas en EEUU y quizá en el mundo. Otro March, con Bettenhausen al volante, tiene problemas en la curva 2 de la vuelta 131. En la recta pierde una rueda. Roberto Guerrero que viene detrás no puede evitarla y la golpea. La rueda salta la valla y cae entre el público matando a Kyle Kurtenbach. Casi 50 años hace que no se producía la muerte de un espectador en Indianápolis.
El golpe revienta el morro de Guerrero que se ve obligado a parar en boxes. La sustitución le deja a 1 vuelta de Mario Andretti. Quedan 70 vueltas y el gran Mario parece que va a repetir, por fin, su victoria de 1969. El colombiano, mientras, rumia su infortunio sin saber que lo peor está por llegar.
EMBRAGUE
El golpe de la rueda en el morro del March del equipo Granatelli, ha provocado más problemas que los cosméticos por la rotura de la carcasa y la fatalidad en las gradas. El cilindro esclavo del embrague se ha dañado y pierde líquido. Algo complicado de ver a simple vista en una parada en boxes frenética para cambiar el morro, y además sin posibilidad de reparación rápida. Mientras se está rodando, y más en Indianápolis, no se nota que el embrague no funciona bien. Pero cuando se para el tema se vuelve crítico.
Mario Andretti sigue su camino hacia su particular ‘Eldorado’ con una vuelta de ventaja sobre el colombiano y otra más sobre Al Unser Sr. A los tres, de los doce coches restantes en carrera, les queda parar una vez más. Rutina. O eso piensan.
A 23 vueltas para el final, Andretti empieza a rodar lento y pierde la vuelta con Guerrero para quedarse parado. Dada su ventaja había empezado a cuidar su motor. Las bajas revoluciones continuadas provocaron un problema de vibraciones, las ondas resonaron, y rompieron una válvula. El combustible entra en el cilindro sin control ni mesura provocando el ahogo del propulsor.
Guerrero es líder con más de una vuelta sobre Unser Sr. al que ha doblado dos vueltas antes.
CALADO
A falta de 18 vueltas el colombiano entra en boxes para su última parada. Ha perdido la 3ª velocidad de su cambio pero eso no es problema. Roberto nota como no puede sacar la velocidad, probablemente cuarta, cuando entra en el carril de boxes. Por más esfuerzos que hace no hay manera. A más fuerte y repetidamente pisa el embrague, el cilindro esclavo no puede con la presión que le manda el cilindro principal, más se desangra entre chorros de líquido hidráulico. Mientras sus mecánicos repostan el motor se cala. Unser Sr. está en la tercera curva, el público empieza a murmurar.
Los mecánicos devuelven a la vida al motor y el March empieza a moverse sólo para calarse otra vez. La tribuna principal ruge cuando Unser Sr. pasa por meta alcanzando el liderato.
Roberto y sus mecánicos logran poner el coche en circulación pero 1 vuelta por detrás con 16 para meta.
A falta de 9 se desdobla mientras Andretti que ha vuelto a pista se queda parado provocando una bandera amarilla. Guerrero está 6 coches detrás de Unser Sr. con vueltas para llegar a meta. Unser Sr. es capaz de mantener a Guerrero a raya por menos de 5 segundos y ganar su 4ª Indy 500.
EL TÍTULO CERCA
Guerrero había ganado en Phoenix antes de Indy. Después lo hizo en Mid Ohio lo que unido a otros dos podios le daba opciones de llevarse el título. Estaba colocado segundo en la general con 4 carreras por disputar y en la cresta de la ola.
El equipo se desplazó a Indianápolis, su sede, para un test de neumáticos. El experimentado Morris Nunn estaba al frente del equipo y puso toda la carne en el asador para intentar asaltar el título. Una maratoniana jornada probando mucho y bien estaba llegando a su fin. Más por las limitaciones de luz y de horarios del propio circuito, que por las ganas del equipo de extraer a la combinación chasis-gomas hasta la última milésima.
Roberto pasaba por meta cuando Nunn le indicaba que volviera a boxes. La jornada había acabado, pero como pasa con las carreras, hasta la bandera a cuadros…hasta el rabo…
Empezando a girar para la curva 1, un enganche del tirante superior de la suspensión trasera izquierda se rompió. El March se fue directo contra el muro en un accidente gordo. Aún así no parecía que hubiese tenido consecuencias graves para Roberto. Sin embargo no se movía ni respondía. No tenía un solo rasguño, ni un hueso roto. Pero la rueda delantera derecha le había golpeado en el casco enviándole a un estado comatoso que se extendió por 17 días.
1982
Su mujer, Katie, no abandonó su vera mientras yacía en el hospital. No hacía otra cosa que recordar lo feliz que había sido cuando Roberto la dijo que se iban a correr a EEUU a principios de 1984.
Roberto había impresionado a su jefes de equipo y rivales desde que en 1976 el dueño de una de las más prestigiosas escuelas de pilotaje, la de Jim Russell, se quedó prendado de las habilidades del joven colombiano. John Kirkpatrick le consideraba por encima de cualquiera a su nivel en ese momento. Tras su paso por FFord, subió a la F3 británica donde tras un año de rodaje, brindó una temporada memorable luchando con Kenny Acheson y Stefan Johansson. Cinco victorias amasó el colombiano, una menos que el campeón Johansson y 2 puntos menos para acabar tercero.
Ese año debutó en Mónaco. 60 F3 luchando por 20 posiciones en la parrilla. No se clasificó en una carrera que ganó un tal Alain Prost.
Al año siguiente se metió tercero en esa misma parrilla. Pero un toque con Boutsen en la chicane y casi irse al agua, al ser embestido, le dejaron fuera de la gloria. El culo de Boutsen sufrió algo más cuando Roberto, en una rara reacción en él, le propinó una patada fruto de la desesperación mientras caminaban por boxes.
Ganó el año siguiente, 1981, en Thruxton en la F2 en una temporada difícil pero con destellos. Pero quería subir a la F1 como fuera de cara a 1982. Quizá otro año en la segunda categoría le hubiera permitido llegar a un equipo mejor que Ensing.
Fue un comienzo de año para no creer. No pudo salir en Mónaco porque el equipo no tenía neumáticos. Fue dolorosísimo ver a Roberto explicando a sus patrocinadores el por qué de su ausencia. Casi justificando al equipo en vez de haber cogido por la pechera a alguno de sus responsables y obligarles a buscar gomas aunque fueran más que usadas. Antes sufrió uno de los comienzos de temporada más caóticos en la máxima categoría. La huelga de pilotos en Sudáfrica. El boicot de varios equipos en Ímola. Las muertes de dos compañeros. Y aún así sus rivales hablaban maravillas de las condiciones y finura del colombiano en su lamentable montura. A pesar de ello se clasificó para tomar la salida en 8 GP y logró un 8º puesto. Con Theodore en 1983 no le fueron mejor las cosas aunque salió a más GP. Pero si el Ensing era un ‘perro’, el Theodore no era precisamente mejor.
Por eso Katie celebró, nacida en California además, la decisión de Roberto de correr en EEUU tras ver que a Teo Fabi no le había ido nada mal en su debut allí.
EL SUEÑO AMERICANO
Unido a Morris Nunn desde el principio, a pesar de ser un pequeño equipo (Cotters-Bignotti), el talento de ambos se sumó para lograr una temporada memorable. Acabó 2º en Indianápolis tras Rick Mears. Lo que supuso el mejor resultado de un debutante desde que Graham Hill venciera en 1966. Acabó 11º en la general y fue nombrado debutante del año. No mejoró posición en 1985 pero hizo 3º en Indy. Sí en 1986 siendo 9º en la general, 4° en Indy y se quedó a nada de ganar en Miami al quedarse sin combustible muy cerca del final. Y así llegó a 1987, reclamado por varios equipos y fichando por Granatelli con gran parte de su grupo, Morris Nunn incluido.
Cuando despertó, su recuperación fue rápida pero no pudo disputar ninguna de las carreras restantes. Sí estuvo de Grand Marshall en la última prueba dando la salida a los rivales con los que se había jugado todo durante la temporada. Al final de la misma ya estaba haciendo test. Pero otro golpe más le aguardaba. Su equipo, Granatelli, decidió cambiar su sede de Indianápolis a Phoenix. Gran parte de su grupo abandonó el equipo. Pero la principal pérdida fue Morris Nunn. Poco a poco los resultados dejaron de llegar y sin rumbo, Nunn había sido su brújula, fichó para desarrollar el motor Alfa Romeo pero aquello fue un desastre. Lo peor es que todos los males se le achacaron a Roberto. Había dejado de ser el mismo a raíz del accidente, decían.
DIGNO
En 1992 fichó por el equipo de Kenny Berstein. Chasis Lola y motor Buick. Se hizo con una impresionante pole en Indy. Pero el motor Buick tenía un grave problema de lag en su respuesta.
En realidad lo tenían los motores de la marca con una sola mariposa. Ese lag era peligroso al salir de boxes, por ejemplo, pero no en carrera una vez rodando. Pero por contra daban un poquito más de potencia a altas revoluciones. Calentando gomas en la última vuelta antes de ver la bandera verde de aquellas 500 Millas, su Lola no pudo aguantar la patada a destiempo del motor Buick y se estrelló contra el muro.
Cuando llegó a boxes, Berstein le dijo que pensara en sí mismo y dijera que algo se había roto. ‘Kenny, no puedo hacer eso. Es fallo mío. Tengo que vivir con ello’, le contestó Roberto.
Pudo haber cerrado cientos de bocazas aquella tarde de mayo de la misma manera en que se condujo toda su carrera. Sin una mala palabra o bronca. Aunque el culo de Boutsen se pregunte: ¿Por qué me tocó la patada?
TALENTO SIN SUERTE
Antes de Juan Pablo Montoya, hubo un piloto colombiano que estaba en otra liga. Su falta de carácter y una pizca de suerte le impidieron hacer cosas grandes en la F1 pero, sobre todo, en la Indycar.
(más…)

APUNTES DE GRAN BRETAÑA 2016

Martes, Julio 12th, 2016
INTOCABLE
El GP de casa fue un paseo para Lewis Hamilton. Siempre tuvo todo bajo control, sustillos aparte, y, sobre todo, margen sobre Nico Rosberg de sobra para rodar tranquilo todo el fin de semana.
La ventaja de Hamilton quedó clara el sábado. Debido a una norma absurda apoyada en excepciones sin pies ni cabeza, su primer intento, que ya le colocaba en la pole, era eliminado de la tabla de tiempos. Con sólo un intento en la Q3, rodó arriesgando lo justo y aún así nadie pudo acercarse al tiempo que marcó.
El domingo y con la carrera saliendo detrás del Safety, el principal riesgo que podía tener, una mala salida, desaparecía y sólo le quedaban por delante una pista golosa y las paradas en boxes.
En las condiciones mojadas primero, mixtas después y secas al final, Hamilton no dio opción a nadie. Dejó el campeonato en empate técnico practicamente a mitad de temporada y una sensación de impotencia en Rosberg.
SÉPTIMA
No pudo Nico en ningún momento con su rival y compañero. Una y otra vez era destrozado en el parcial intermedio de Silverstone por Hamilton. Sin respuesta, el alemán sólo podía confiar en una mejor salida que le permitiera ponerse por delante de Lewis e intentar mantenerse ahí.
Lejos de eso se vio luchando a brazo partido con Verstappen. El holandés le abrasó en las condiciones mixtas, pero Nico se rehizo con la pista seca y repuso el orden normal. Pero quedaba un golpe final. Su séptima velocidad empezó a fallar. Recibió una indicación desde su muro pidiendo un cambio de mapa, a priori permitido, pero también le dijeron que evitase usar esa marcha. Eso no gustó a los comisarios que, tras una larga deliberación, decidieron imponerle una penalización benevolente que le costó un puesto. Bajar de la segunda a la tercera posición y mantener el liderato del mundial por un solo punto. Digo benevolente porque cualquier infracción al reglamento técnico supone la exclusión de la carrera.
RED BULL
Los Red Bull fueron como un tiro según eran más difíciles las condiciones. Su eficiencia aerodinámica les permitió mantener el ritmo de Mercedes. Luego en seco, tuvieron que doblegarse al mayor potencial del propulsor alemán. Sin duda Verstappen fue el hombre de la carrera. Luchando y batiendo a Rosberg para pasar, después, a ser acosado y dar otro master defensivo hasta que le fue imposible mantenerse más. Sabíamos de las actitudes ofensivas de Max, las defensivas habían aparecido pero el domingo quedaron más que claras. Ahí, también, empieza a ser excelso el de red Bull.
Por su parte Ricciardo completó una gran carrera. Carrera, por cierto, que pasó desapercibida y en la que si sólo miramos a la clasificación, queda que fue batido por Verstappen. Ricciardo fue uno de los pilotos que se zambulló hacia boxes cuando el Safety iba a retirarse. Justo al volver a la pista, Werhlein se salió y se impuso un Virtual Safety Car. Eso le dio una parada ‘gratis’ a Verstappen, entre otros, y fue una desventaja que el australiano no pudo recuperar. Su cuarta plaza es buenísima y debe valorarse como tal.
PENAR
Ferrari pasó un fin de semana muy duro. Incapaces de capitalizar la lucha interna en Mercedes, a pesar de anunciar la renovación de Kimi, estuvieron siempre por detrás de Mercedes, lógicamente, y de Red Bull. Probablemente la elección de gomas para este GP, la más duras del catálogo, no les vino bien. Ni el tiempo, ni la temperatura más bien baja. Pero es que, ¿les viene bien algo?
Además llegó una rotura más para Vettel. Otra caja de cambios. Y sólo ahora, después de que hayan caído un puñado de averías, parece que se dan cuenta que es una partida defectuosa de algún material. Raikkonen, dadas las circunstancias, estuvo a lo suyo y salvó algún mueble. Vettel, arriesgando al máximo (fue el primero en cambiar a ruedas de seco) no pudo llegar más arriba. A una vuelta rápida tras cambiar de gomas, le siguió un trompo que le retrasó. Duro fin de semana para el alemán que tampoco pudo brillar en las condiciones más difíciles. Sin olvidar que Kimi le dio para el pelo durante todo el fin de semana. Cierto es que el carácter fluido y las rápidas curvas de Silverstone le van como anillo al dedo al finlandés.
McHONDA
Poco a poco McLaren y Honda van escalando. Ya es habitual ver entrar, al menos a un coche, en Q3 y cada vez más holgados. Lo que no quita, dada la igualdad de la clase media de la parrilla, que haya que currárselo. Alonso brilló el sábado a pesar de serle birlado un tiempo. Button el domingo. Aunque Alonso, siempre al ataque, dejó algunos de los mejores momentos del GP luchando con los Williams y luego, tras una salida de pista tremenda en la curva 1 terminando en la grava, volviendo a traves de la misma y siguiendo atacando sin premio. Quedarse detrás de los Williams fue mortal en sus aspiraciones. Los coches británicos no iban ni para atrás, al no calentar sus gomas, pero en los sitios donde se puede adelantar, su motor Mercedes les permitía sobrevivir. Sobre todo a Massa, ya que Bottas trompeó y terminó hundido.
DIRECCIÓN
Ya puesto el grito en el cielo sobre las decisiones de quitar o no tiempos el sábado, el reglamento dice que hay que mantenerse en la pista salvo causa de fuerza mayor, que abrió la puerta a decisiones arbitrarias. Tenemos la decisión de salir tras el Safety el domingo. Por supuesto que mucha culpa la tiene Whiting. Hay una corriente muy amplia en el paddock que achaca la decisión de salir tras el coche de seguridad con tres gotas que caígan, a lo sucedido con Bianchi en Japón. Es una manera de lavar la conciencia. En cualquier caso subyace algo más simple, que añadido también, que es el rendimiento de la goma de mojado de Pirelli. A pesar de la orden expresa de Ecclestone de no criticar al fabricante italiano de neumáticos, Vettel lo dejó claro. ‘Los pilotos no confiamos en las Full Wet’. Con eso está dicho todo. Veremos que reacción hay a las palabras del alemán y si hay llamada al orden como pasó con Alonso en su día. Va a ser que no, seguramente. Sin obviar la reomendación del número de vueltas máximas a dar con cada juego. Pero lo de Vettel en Austria fueron por suciedad en la pista.
LÁSTIMA
La curva 1 tuvo un protagonismo estelar en la carrera. Una vez que se cambió a gomas de seco, el festival de sustos fue interminable. Pero más que por lo mojada que estaba la curva, que sí, fue por las rachas de viento que descolocaban a los coches. Era curioso porque si ibas sólo, el coche daba un latigazo más o menos controlable y se arreglaba yéndote largo. Pero si ibas cerca del coche de delante, el trompo era casi inevitable. Pocos se libraron de mirar a Cuenca en algún momento de la carrera.
Sainz pudo haber conseguido algún puesto mejor. Uno al menos. Pero en cualquier caso su carrera no fue mala. De nuevo por delante de Kvyat.
Force India no tuvo el mejor de sus findes, pero lograron un buen resultado global. Y a la vista de lo ocurrido, el mejor posible.
Mercedes hizo amago de apelar la sanción a Rosberg pero se lo pensaron mejor. No sería la primera vez que una sanción es agravada en una apelación en vez de aliviada. Eso sí, dejaron alguna pregunta en su comunicado sobre si la F1 no está sobre regulada. Lo ocurrido traerá cola, faltaría más.
Así que tenemos un final de julio con dos carreras. Hungría y Alemania. Seguidas, con poco margen entre ellas. Con Hamilton en la cresta de la ola y a 1 punto de Rosberg. Nico que debe jugar al ataque ya que a defender ha dejado claro que no sabe. Con McHonda recuperando poco a poco, con Red Bull que es capaz de dar batalla, con Ferrari en una crisis que se profundiza y con la encrucijada de ‘tirar’ ya la temporada y poner todos los recursos en 2017 o no. La verdad es que pese al dominio aplastante de Mercedes, seguimos teniendo una temporada bastante apañada. Por mucho que Hamilton parezca intocable.
INTOCABLE
El GP de casa fue un paseo para Lewis Hamilton. Siempre tuvo todo bajo control, sustillos aparte, y, sobre todo, margen sobre Nico Rosberg de sobra para rodar tranquilo todo el fin de semana.
(más…)

APUNTES DE AUSTRIA 2016

Martes, Julio 5th, 2016
CONTROL
Mercedes pensó que tenía todo controlado en el GP de Austria. Pero el control es una ilusión. Y en el descontrol que provoca esa ilusión, nos ha quedado un campeonato más que calentito.
La última parada en boxes del GP de Austria, fue la guinda de cómo el querer o creer controlar,o tener controlado todo, se viene abajo por detalles que van generando cambios y desembocan en el caos que fue la última vuelta.
No sé si son los pilotos los que eligen las gomas cuando toca con la antelación que pide Pirelli. Quiero pensar que sí aunque no me extrañaría que fuera cosa de su ingeniero de pista. Así, en su día, Rosberg eligió para este GP un juego sólo de blandas, por dos de Hamilton mientras éste se presentaría el fin de semana con uno menos de súper blandas.
ILUSIÓN
El problema de Rosberg en los libres fue más allá del susto. Le obligó a cambiar la caja de cambios y a penalizar 5 posiciones. En un trazado donde el alemán suele ser excelso, el revés era importante. La pole de Hamilton no ayudó a lo suyo en las difíciles condiciones en que se disputó.
Mercedes programó, controlando la situación, un parada para Hamilton y dos para Rosberg. Para ello Lewis volvió a hacer un primer relevo tremendo con la ultrablanda. Todo lo contrario que Rosberg que tuvo que parar en la vuelta 10. Cuando el alemán volvió a la pista empezó a hacerlo a un ritmo demoledor. Aprovechando su comunión con el trazado empezó a recortar tiempo a Hamilton. El inglés paraba en la 21 y volvía a pista 5 segundos por detrás de Rosberg. No hay que olvidar que el objetivo número 1 de Mercedes es asegurar la victoria. Mientras esto no sea así, los pilotos no pueden actuar de manera independiente y sólo verán su estrategia cambiada para hacer frente a la amenaza de otro equipo. Y entonces se estrelló Vettel.
DUDAS
Hamilton debía ir hasta la 23-25. Pero el nuevo asfalto cazó a la elección que propuso Pirelli, que se vio jugando agresivo, sin quererlo, en terreno austriaco. Los neumáticos no aguantaban lo que se pensaba y el ‘graining’ los deterioraba aún más. El inglés tenía 13 vueltas más en sus gomas que Rosberg tras su parada y el alemán debía de parar de nuevo. Pero el accidente de Vettel, al estallarle el neumático trasero derecho, cambió el panorama. El Safety Car eliminó la ventaja sobre los perseguidores, Red Bull y Raikkonen, y de repente la carrera podía perderse por parte de Mercedes. Probablemente había miedo a Verstappen que había parado en la 15. Max ya había demostrado que podía hacer durar las gomas. Pero sobre todo la amenaza de Raikkonen. El finlandés había parado en la 22, similar a Hamilton aunque su juego de blandas, aparte, tenía alguna vuelta más. Así que con Rosberg que tenía que parar, sí o sí, cayendo en las garras de ambos casi seguro y con Hamilton con dudas sobre si podría llegar hasta el final, decidieron cambiar a Hamilton a dos paradas también.
CONTROLAR
Hamilton declaró que se le pasó por la cabeza no hacer caso y seguir o no parar, pero pasó por el aro. Mercedes decidió que Hamilton parara primero porque se había visto perjudicado y hacerle así un ‘undercut’ a Rosberg. Pero como diría Pérez Reverte, el gorrino les salió mal ‘capao’. El inglés llegó a boxes y la rueda trasera izquierda decidió hacerse la interesante, y sumó dos segundos a su parada. Le montaron aquel juego de blandos de más que había elegido. Él, su ingeniero o el equipo. Ítem más. En la segunda curva, y sabiendo que debía ir lo más rápido posible para hacer el ‘undercut’ a Rosberg, se salió con las ruedas frías. Rosberg por su parte tuvo una parada estratosférica y le montaron el juego de súper blandos extra que tenía. Juego que metió en cintura con la temperatura rápidamente. Cuando volvió a pista estaba por delante. Hamilton chilló por la radio preguntando por qué llevaba un juego de blandos y Nico los súper blandos. Su ingeniero, de diez, le dijo que eran las gomas ideales para ese momento de carrera. Quedaban quince vueltas y ese mensaje hizo ‘click’ en Hamilton que apretó los dientes. Efectivamente la estrategia de Mercedes se probó correcta. Superioridad del monoplaza aparte. Pronto ambos pasaron a Verstappen. Rosberg mantenía el tipo. Pero la baja temperatura del asfalto empezó a reclamar su parte a los súper blandos de Rosberg. Y apareció el graining. A falta de cuatro vueltas con Hamilton acercándose, un grupo,de tres doblados dieron aire a Rosberg. Pero no había mucho tiempo para jugar porque éstos se comportaron y no supusieron ningún problema para ambos. Cuando empezaron la última vuelta Hamilton iba a por todas. En el primer vértice Rosberg se tiró demasiado por dentro. Su coche se descolocó un poco y perdió ‘momentum’. Hamilton inmediatamente subió una velocidad para tener mejor tracción sin derrapar y se catapultó hacia la trasera y el rebufo de Rosberg, ojo que no había DRS, primero, y en el amago a la izquierda camino de Remus ponerse a la altura de su compañero y rival y superarle levemente. Hamilton se fue hasta el límite exterior de la pista mientras Rosberg, por dentro, no hacía la más mínima intención de girar. Cuando Hamilton decidió que era suficiente la intimidación giró. Al estar levemente por delante, pisó el alerón de Rosberg, impactó y se fue por fuera. Volvió a la pista como un poseso, parecía que se iba a por el coche del alemán, y justo al incorporarse justo detrás, el alerón de Rosberg colapso quedándose debajo del coche. Hamilton le pasó sin problemas y se encaminó a una victoria que siempre pensó que era suya y Rosberg caía a la cuarta plaza. Lo peor estaba por llegar para el alemán.
Comisarios, su equipo, prácticamente todo el mundo le señaló como culpable. Wolf le señaló pero también dijo que le faltaban, ambos, al respeto a las 1.500 personas que trabajan por tenerles los coches a punto.
ERROR
Nico no sabe ser malo. Y ha hecho alguna otra más grave que esta de la que salió de rositas, el aparcamiento en Mirabeau por ejemplo. Estando por delante en el mundial, debió de haber sido duro, sí, pero pensar que la segunda plaza no era mala saliendo sexto. Contando con que Hamilton va a penalizar diez posiciones más pronto que tarde. Pero en el fragor de la batalla no fue capaz de procesar eso. Y forzó la máquina en un:’Antes de que ganes tú nos vamos los dos fuera’.
En Ferrari terminaron con sabor agridulce. El reventón de Vettel, del que no se sabe que lo provocó, fue un jarro de agua fría reparado en parte con el podio de Raikkonen. Por cierto, igualado a puntos con el, antes, niño maravilla. Hay dudas sobre por qué fue tan largo el alemán con sus gomas cuando no tenía ritmo. Los misterios insondables del muro ‘rosso’.
Maravillosa carrera de Verstappen, quizá casi al nivel de Barcelona. Porque aquella fue su estreno y ganó. Pero aquí volvió a rayar a un nivel altísimo en carrera.
Button estuvo magistral, primero el sábado, luego al principio de carrera y no descolgándose tras el safety. Por su parte Alonso no se quedó atrás. El error del equipo el sábado le privó de una posición de salida similar a la de Button. En carrera brilló a pesar de una batería recalcitrante que le dio muchos problemas y que al final le hizo abandonar.
No menos grande fue la carrera de Sainz. Condenado además, de nuevo, por dos paradas demenciales del equipo, fue capaz de llegar hasta la octava posición. Y no menos impresionante que el fin de semana de Werhlein que acabó décimo tras asombrar con una ‘Q’ de escándalo.
El control de Mercedes ha acabado en descontrol absoluto. Tienen una situación crítica entre manos. Con Rosberg negociando para renovar. Con Hamilton descontrolado totalmente y al que no creo que puedan meter en vereda. Y sin tiempo para masticar la situación porque de nuevo tenemos o GP y además en casa de Hamilton. Y con los pitos de los ignorantes, porque no creo que sean racistas, aficionados austriacos que demostraron que no aprendieron mucho de sus glorias, Marko, Rindt o Lauda, el ambiente va a estar muy tenso y calentito. Veremos qué hace Mercdes para pensar que tienen el control.
CONTROL
Mercedes pensó que tenía todo controlado en el GP de Austria. Pero el control es una ilusión. Y en el descontrol que provoca esa ilusión, nos ha quedado un campeonato más que calentito.
(más…)